Manuel de Falla basó su ópera de cámara "El retablo de Maese Pedro" en el Capítulo XXVI de
la Segunda Parte de la novela "El Quijote" de Miguel de Cervantes" y sugirió además montarla con títeres, pues ese capítulo narra
“la graciosa historia del titerero”.
La acción tiene lugar en una venta manchega donde Maese Pedro y su ayudante, el joven Trujamán, ofrecen una función de títeres para los huéspedes.
Entre los espectadores se encuentran Don Quijote y Sancho Panza.
Los
títeres representan “el retablo de la libertad de Melisendra”,
un romance medieval que cuenta cómo Don Gayferos rescata a su esposa
Melisendra, prisionera por los moros en la ciudad de Sansueña
(antigua Zaragoza). Don Quijote, al observar la escena, metido de
lleno en la acción y queriendo hacer justicia, desenvaina su espada
cuando los amantes huyen y son perseguidos por los moros. Pero los
gestos del valeroso hidalgo sólo consiguen destrozar el teatrino y
los muñecos del titerero.
Para su partitura Manuel de Falla emuló la mezcla de estilos
literarios que utilizó Cervantes, y compuso su ópera a partir de
músicas de diferentes épocas y estilos, combinando notas antiguas,
folclóricas, litúrgicas o de vanguardia.
A estado muy bonito, un poco corto pero mola. A Isa BON NADAL!!!!! Que te lo pases bien, hasta el año que biene:-) .TKM=te quiero mucho.
ResponderEliminar